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Llamado al día de acción anti-racista – el 5 de julio del 2002 en Berlín
Aktionsbündnis  22.
Mai 2005
Los refugiados en la República Federal de Alemania se ven sometidos a
limitaciones legales de toda clase. No tienen el derecho a trabajar y reciben
su asisitencia social principalmente en especies. Son alojados en grandes viviendas
colectivas y no les está permitido abandonar el distrito que les ha sido
asignado (obligación de residencia). Berlín y Brandemburgo juegan
otra vez uno de los roles principales en el teatro del racismo estatal. Aquí los
pagos se efectúan en forma de discriminatorias tarjetas electrónicas
que son aceptadas solamente en muy pocas tiendas y que además son caras.
Cuando se publicó el Acuerdo de Gobierno del SPD/PDS en Berlín,
parecía que iban a mejorar por lo menos algunos aspectos de la política
de refugiados. Pero lamentablemente la realidad es distinta y por eso protestamos
contra la política racista del gobierno, especialmente contra la senadora
de asuntos sociales, Heidi Knake-Werner (PDS), responsable de esta política.
Actualmente, la Administración Social tiene el proyecto de alojar a postulantes
a asilo político y refugiados políticos en bloques de viviendas
abandonados y prontos a ser demolidos, en el este de la ciudad. De este modo
la senadora del PDS Heidi Knake-Werner quiere llevar a cabo una decisión
ya tomada bajo la coalición CDU/SPD. Al parecer, esto significa un mejoramiento
comparado con el alojamiento en viviendas colectivas, pero en realidad es otro
paso hacia la solidificación de una estigmatización de los refugiados
que empezó hace ya mucho tiempo. El alojamiento en edificios completamente
desocupados dificulta la integración y crea nuevos gettos en las periferias
de la ciudad. De esta manera los refugiados son otra vez marginados y utilizados
para mantener en pie estas edificaciones pertenecientes a sociedades constructoras
altamente endeudadas. Utilizados por el Estado, aislados del resto de la población
y desprotegidos de ataques nazis, los refugiados en Berlín han de ser
marginados.
El sistema de las tarjetas electrónicas se sigue practicando en Berlín
y Brandemburgo. Este sistema discrimina a los refugiados porque les impone a
qué hora, en qué tiendas y a qué precio deben comprar sus
comestibles. Al mismo tiempo les impide ahorrar dinero para cosas tan importantes
como la contratación de un abogado. Quien haya ido de compras con un refugiado
conoce los frecuentes insultos racistas de las cajeras, los jefes de local y
del público en general. La continuación del contrato de la senadora
de asuntos sociales Knake-Werner con la empresa SODEXHO/PASS impide que los refugiados
puedan en el futuro recibir dinero en efectivo y puedan comprar en cadenas de
supermercados baratas que no aceptan estas tarjetas electrónicas. Por
medio de esta política, empresas como SODEXHO/PASS y ACCOR perciben millones
con sus sucios negocios.
La detención para expulsar es la medida más inhumana en la cadena
de todas las leyes racistas. A pesar de que ya en septiembre del 2001 hayan sido
decididas algunas pequeñas “mejoras“ (prohibición de
detención para embarazadas y menores de edad, separaciones en las duchas),
hasta hoy ninguna de ellas ha sido realizada. Actualmente, en las cárceles
de expulsión de Berlín y Brandemburgo en Grünau, Köpenick
y Eisenhüttenstadt están detenidas más de 500 personas. Estas
personas no han cometido ningún crimen más que haber huído
a la RFA. Junto a la su función original, la preparación para la
expulsión, la detención para expulsar se sigue usando como detención
al margen de la legalidad, para presionar a las personas o para conseguirse un
pasaporte. Así es una realidad en la RFA que personas sean encarceladas
por meses sin haber cometido delito alguno y sin haber sido juzgadas.
Estos ejemplos muestran que el PDS, con su imagen anti-racista, sólo tenía
la intención de venderse con fines electorales. Junto con la aprobación
de la racista Ley de Migraciones, el proyecto de alojar a los refugiados en los
viejos bloques de viviendas (y la consiguiente creación de gettos) es
puro cinismo comparado con la oferta de alojar a los refugiados en apartamentos
privados. Con esta política racista, el PDS se ha autodescalificado y
recibe por ello la “TARJETA ROJA ANTI-RACISTA“. de nuestra parte.
Pues la política del PDS no se mide según sus promesas sino según
los cambios reales, y ellos lamentablemente no significan nada bueno para los
refugiados que viven en la RFA.
¡Por esto, apelamos a hacer del 5 de julio del 2002 un día de acción
anti-racista! A las 11 de la mañana, frente al edificio de la Administración
Social (Oranienstr. 106) vamos a entregarle la “TARJETA ROJA ANTI-RACISTA“ a
la senadora de asuntos sociales Knake-Werner. Venid todos para mostrarle a la
senadora que no nos engañará.
Les invitamos a participar en una gran manifestación ruidosa y colorida
que tendrá lugar a las 16.30 horas para demostrarles a las autoridades
de Berlín que no pueden seguir así. Llevaremos nuestra protesta
a la calle para exigir igualdad ante la ley. ¡Venid todos y traed a vuestros
amigos! Lugar de encuentro: delante de la Humboldt-Universität, Unter de
Linden 6, a las 16.30 horas, concierto de clausura en el Heinrichplatz en Kreuzberg.
Allí demostraremos otra vez nuestra ira con el trato racista hacia los
migrantes. Nos apoyarán con su música los grupos „Flexicute“ (Berlin), „Kommando
Victor Zoy“ (Potsdam) y ... Por supuesto también habrá buenos
oradores y comida sabrosa.
Nuestras exigencias
- Abolición del “Asylbewerberleistungsgesetz“
- Abolición de la obligación de residencia
- Cierre de las cárceles de expulsión
- Liberación de todas las personas detenidas en ellas
- Abolición de todas las demás leyes contra los migrantes y refugiados
El día de acción anti-racista es apoyado por: AGIP [Antifaschistische
Gruppe im Prenzlauerberg], AIM [Antifa in Moabit], ARI [Antirassistische Initiative], „AusländerInnen“Liste
der FU, AUTOPOOL, f.e.l.S. [für eine linke Strömung], FFM [Forschungsstelle
Flucht und Migration], Flüchtlingsinitiative Brandenburg, Initiative gegen
Abschiebehaft, Gruppe Sabotage, Initiative gegen das Chipkartensystem, JungdemokratInnen/Junge
Linke (Berlin), KMI [Kein Mensch ist illegal], Komitee zur Unterstützung
der politischen Gefangene im Iran/Berlin, Prof. W.-D. Narr
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